La historia de Caleb, (quien era uno de los 12 espías del pueblo de Israel enviados a reconocer y a traer informes de la tierra prometida), debería inspirarnos, animar a terminar lo emprendido. Desafía a finalizar la carrera propuesta. Amonesta a no rendirse, a no quedarse a la mitad del camino. Impulsa a llegar a la meta, a alcanzar el objetivo, a ser fiel al señor hasta el fin. Cuantos proyectos se inician y no se terminan. Se inicia la vida matrimonial y tiempo después se rompe la relación. Se inicia la escuela pero no se concluye. Las dietas para adelgazar se quedan a medio camino. Los propósitos de año nuevo se olvidan en cuestión de días. Y lo mas triste aun, se comienza la vida cristiana y se abandona; no se llega hasta el final. La vida de Caleb contiene el secreto para una larga vida espiritual. Caleb fue fiel hasta el fin. Nunca envejeció espiritualmente. Es un ejemplo de cómo envejecer en edad, pero mantenerse fuerte y sano espiritualmente...
"Asi que no nos fijamos en lo visible sino en lo Invisible, ya que lo que se ve es pasajero, mientras que lo que no se ve es Eterno" 2a Cor 4:18